En la FFYL se imparte el módulo I del Seminario “El Compromiso Ético Universitario y la Inclusión Social” para futuros brigadistas de servicio social
Por Auxiliar Web VespertinoEl pasado viernes 24 de enero, la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) impartió el seminario “Compromiso Ético Universitario y la Inclusión Social”, una iniciativa que busca reforzar la importancia del servicio social como pilar en la formación profesional y humana de los universitarios.
El seminario fue impartido por la licenciada Nidia González Airola, coordinadora del Departamento de Servicio Social de esta facultad, y contó con la participación de trece alumnos provenientes de distintas licenciaturas, como Ciencias de la Comunicación, Periodismo, Filosofía y Sociología, entre otras.
Entre los asistentes, destacó la egresada de Ciencias de la Comunicación, Mariam Lizeth Ochoa González, quien reflexionó acerca del valor del evento: “Aunque al principio pensé que era un protocolo más, considero que es importante asistir porque te informan por qué y para qué se hace el servicio social. Siento que esto motiva aún más a realizarlo con un mayor compromiso”, dijo.
Dicho seminario no se limitó a cumplir con un procedimiento académico, sino que buscó reconfigurar la percepción del servicio social como una simple obligación universitaria. “Esta es la esencia del servicio social: identificar problemas en la sociedad y proponer soluciones concretas. Además, es una oportunidad para desarrollar proyectos que generen un impacto positivo en las empresas e instituciones de nuestra localidad”, enfatizó la coordinadora de servicio social.
Esta visión fue compartida por Martha Gómez Trujillo, estudiante de Sociología, quien destacó la utilidad del seminario en términos prácticos: “Me sirvió porque ahora sé cómo hacerlo correctamente, desde los procedimientos hasta la documentación. Me voy con la confianza de concluirlo de manera efectiva”, expresó.
Cabe decir que más allá de los aspectos técnicos, el seminario sirvió como un recordatorio de la responsabilidad social que los universitarios deben asumir. “Espero que lleven a cabo su servicio social en tiempo y forma, aplicando lo aprendido en sus licenciaturas. Que puedan devolver algo de lo que la universidad les ha brindado, marcando la diferencia en las instituciones donde presten su servicio”, concluyó González Airola.
La experiencia dejó claro que el servicio social no es solo un trámite burocrático, sino una herramienta para transformar realidades y construir puentes entre la academia y la sociedad. Con iniciativas como esta, la UAS sigue formando profesionales conscientes de su entorno y comprometidos con el cambio.