Brigadistas de la Facultad de Informática fortalecen a su comunidad académica mediante el “Programa Educativo de Asesoría Par

Por Auxiliar Web

Alumnos de la Facultad de Informática Culiacán (FIC) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) están marcando la diferencia al participar en el “Programa Educativo de Asesoría Par” diseñado para apoyar a sus compañeros en su desarrollo académico y personal. El proyecto titulado “Asesoría Par para los programas educativos de la Facultad de Informática Culiacán”, cuenta con la participación de los brigadistas Diego Bórquez Barboza, José Yahir Ramírez Ramos, Daniel Corrales Lozano, Fidel Isaac Fragoza Gaxiola y Exon Yair Sánchez García, todos estudiantes de la Licenciatura en Informática. El presidente del Comité de Asesores Par, Diego Bórquez Barboza, explicó que su la labor principal de la brigada “es apoyar a los alumnos con dificultades académicas” incluyendo la organización de reuniones con maestros, la elaboración de guías de estudio y coordinación de esfuerzos con el Departamento de Tutorías para garantizar la cobertura de los estudiantes que “más lo necesitan”. Por su parte, José Yahir Ramírez destacó el impacto que tiene el proyecto, especialmente entre estudiantes con necesidades académicas o capacidades especiales. “Este programa ayuda a los alumnos rezagados a mejorar su rendimiento académico. Muchas veces, los estudiantes no se acercan a los docentes por temor, y ahí es donde entramos nosotros, porque somos compañeros de la misma facultad. Esto genera confianza y facilita el proceso de aprendizaje. También nos encargamos de dar un trato especial y cordial a aquellos compañeros con capacidades diferentes”, señaló. A lo largo de su estancia de seis meses en el servicio social, los brigadistas realizarán actividades clave para cumplir los objetivos del programa antes mencionado. “Entre nuestras principales actividades está la elaboración de guías de estudio digitales, las cuales subimos a la plataforma Notion para las tres carreras que se imparten en la Facultad. Además, participamos en acciones sociales, como recolectar juguetes para personas de escasos recursos durante la temporada navideña y organizar campañas de recolección de tapitas para apoyar a pacientes con cáncer. Todas estas actividades se integran en un cronograma que monitoreamos constantemente para garantizar su cumplimiento”, detalló Diego Bórquez. El impacto de este proyecto también es medido a través de metas específicas, ya que el objetivo principal “es garantizar que al menos 80 de cada 100 alumnos con materias pendientes logren aprobar alguna de ellas”. “Si logramos que un 80 por ciento de los estudiantes avance; eso ya es un gran logro para nosotros”, dijo. Además de apoyar a sus compañeros, el proyecto brinda a los brigadistas la oportunidad de desarrollar habilidades que les serán útiles en su futuro profesional. “Gracias a este proyecto he mejorado en el trato con los demás, en la forma de socializar y compartir conocimientos. El impartir asesorías también me ha ayudado a reforzar lo aprendido en mi carrera y a desarrollar habilidades administrativas al usar nuevas plataformas que desconocía”, reflexionó José Yahir. Todos coincidieron en que esta experiencia les ha permitido “entender mejor su rol como futuros profesionales y su capacidad para generar cambios positivos”. “Este proyecto es muy gratificante porque, al estar en la misma Facultad, podemos ver directamente el impacto que tiene nuestro trabajo. Ayudamos a compañeros a mejorar académicamente y, al mismo tiempo, participamos en actividades sociales que marcan la diferencia”, añadieron. Por último, el brigadista Bórquez Barboza destacó la satisfacción de ver a los beneficiarios convertirse en asesores par. “Es increíble ver cómo estudiantes que estaban en riesgo de repetir el año ahora son parte del equipo de asesores. Esto demuestra que, cuando se hacen las cosas bien, se pueden superar los retos académicos y ayudar a otros a hacer lo mismo”, apuntó. Este programa no solo fortalece el desempeño académico de los estudiantes, sino que también fomenta valores como la colaboración, la empatía y el compromiso social en la comunidad universitaria.